La educación musical de los niños

La música es capaz de ambientar cualquier situación, fomentando la autoestima y ayudando al desarrollo social, emocional e intelectual de las personas. A cualquier edad, la música estimula nuestra imaginación y da rienda suelta a la creatividad de los compositores que llevamos dentro, pero los niños son mucho más susceptibles a su influencia. La psicóloga Anayanci Mazariegos explica en su artículo muchas otras funciones que tiene la música en la educación diaria de los más pequeños.

Las melodías establecen rutinas

Para empezar, la música establece rutinas, como la de dormir después de escuchar siempre la misma melodía. Los padres también logran de este modo establecer un vínculo con sus hijos, cantándoles y estrechando lazos que perdurarán en el tiempo.

Por otra parte, es una forma de expresar sus emociones y compartirlas con sus padres que, también a través de la música, pueden lograr sintonizar mejor con sus hijos, tratar de calmarles y comprender sus sentimientos, compartiendo con ellos los buenos y los malos momentos.

Como dice la psicóloga, la música ayuda a los niños a entender el mundo. Con las canciones, los niños aprenden palabras que serán la base de su lenguaje y que les permitirán avanzar en la lectura y la escritura.  Con la repetición consiguen interiorizar mejor los nuevos conceptos y fortalecer el aprendizaje. Además, mejora la coordinación motora al adaptarse al ritmo musical.

A día de hoy está probado que existe una correlación entre la educación musical y el desarrollo integral de los niños como aclaran en el libro La música en la escuela infantil.

La autodisciplina, la paciencia, la sensibilidad, la memoria, la concentración o el trabajo en equipo son habilidades que se ven afectadas por la música. Así mismo, la capacidad de aprendizaje de la lengua o de las matemáticas se incrementa con el apoyo musical. 

Es posible que hayáis oído hablar del efecto Mozart, una consecuencia de la exposición a la música de este famoso compositor, pero por si este no fuera el caso, os transmito lo que dice tan controvertida teoría. Según defienden numerosos investigadores, la música de este y otros clásicos compositores afecta al cerebro y provoca cambios en el comportamiento humano. En referencia a los niños, esta teoría viene a decir que la exposición dosificada a estas sinfonías estimula la inteligencia de los niños durante sus cinco primeros años de vida, además de mantenerlos emocionalmente sanos. Si bien es cierto que desde el 5º mes de gestación el feto ya desarrolla su sistema auditivo, el cual debe ser estimulado por la madre para ir estrechando lazos, los estudios demuestran buenos resultados hasta los cinco años.

Os dejo con un vídeo musical para que escuchéis y juzguéis por vosotros mismos el efecto que esta música tiene en vuestros pequeños:

Psicología del dibujo infantil

Para seguir de cerca la evolución de vuestros hijos, es algo esencial prestar atención a sus dibujos. Son su sello de identidad y pueden mostrar sueños, temores, dudas o problemas que puedan tener en su vida. He ido recogiendo la información más útil que he encontrado para guiaros, de forma básica, en la interpretación de los dibujos de los pequeños, pero existen manuales o especialistas que podrán ayudaros si realmente os interesa.

Hay varios puntos en los que debemos poner especial interés: la posición del dibujo en el folio, su tamaño, el tipo de trazos que lo forman y los borrones o tachaduras que haga en él, la presión que ejerce al dibujarlo, las formas que lo conforman, los temas del dibujo y, por supuesto, los colores que emplea, que ya analicé en la anterior entrada. Lo que os voy a contar a continuación lo tenéis recogido en el libro de Nicole Bédard titulado Cómo interpretar los dibujos de los niños.

LA ORIENTACIÓN ESPACIAL

• Parte superior del folio: indica disposición a adquirir nuevos conocimientos. Representa la cabeza, la imaginación y el deseo por descubrir.
• Parte inferior del folio: indica las necesidades tanto físicas como materiales del niño.

• Margen izquierda del folio: indica que el niño piensa en el pasado. El tipo de dibujo aclarará si lo que trata es de aferrarse a un grato recuerdo del pasado o si siente preocupación por algo que le ocurrió.
• Parte central del folio: indica que niño no se preocupa por lo que haya ocurrido en el pasado ni por lo que vaya a ocurrir en el futuro, sino del momento actual. No sufre ansiedades ni tensiones, pero puede desanimarse con facilidad si no ve los resultados de aquello que hace al momento, de modo que es preferible no darle responsabilidades a largo plazo.
• Margen derecha del folio: indica que el niño sólo piensa en el futuro, donde pone sus esperanzas.

LAS DIMENSIONES

• Dibujo grande: muestra inseguridad o bien falta de atención. Si los colores son fuertes (rojo, naranja o amarillo) indicará que busca llamar la atención, puede que siempre necesite hacerlo para satisfacer su ego; sin embargo, si los colores empleados son suaves, el niño se comporta adecuadamente.
• Dibujo pequeño: es característico de niños tranquilos, reflexivos, que no molestan, a quienes les gusta soñar y que no buscan compañía. También puede significar una falta de confianza en sí mismos, por lo que se les debe valorar aunque su desarrollo sea lento.

LOS TRAZOS

• Trazo continuo (sin interrupciones): es característico de un niño dócil, que busca su bienestar respetando su entorno. Si además las líneas son precisas, indican armonía.
• Trazo borrado o cortado (con paradas): indica indecisión ante los cambios, una inestabilidad ante las nuevas necesidades o deseos que surgen y aquello que ya tiene.
• Trazo oblicuo: indica energía e ímpetu, indica la seguridad de un niño para lograr su objetivo. Si además la presión ejercida es fuerte, puede denotar agresividad.

LA PRESIÓN

• Fuerte: indica entusiasmo, pero cuanto más fuerte es, más agresividad denota.
• Débil: indica distanciamiento y poca convicción sobre aquello que dibuja.

LAS FORMAS

• Círculo (líneas curvas): denota alegría. Si el trazo es fuerte y ágil, significa que una experiencia ha colmado al niño de valor y fortaleza. Si el dibujo tiene muchas formas curvilíneas, demuestra que el niño tiene interés en lo que ya conoce. Si el trazo es amplio y grueso, indica pereza o falta de motivación.
• Cuadrado (trazos rígidos): denota desde soledad, determinación y poder de decisión, hasta una cierta rebeldía. Es característico de niños que necesitan quemar energía, con un carácter fuerte o algo bruscos en sus movimientos. Su fuerza es el espíritu competitivo, mientras que su debilidad es la falta de compasión.
• Triángulo: representa el conocimiento. Si el vértice apunta hacia arriba, el niño es más sensible, creativo e intuitivo que el resto de niños, tranquilo a la par que curioso, ansioso de conocer cosas nuevas, aunque puede ser algo selectivo. Si el vértice apunta hacia abajo, el niño quiere nuevos conocimientos materiales y no espirituales, es más pragmático: conseguir cosas nuevas, aumentar su comodidad...

LOS TEMAS

Según el Manual del desarrollo psicomotor del niño, los temas sobre los que más dibujan los niños y que más pistas pueden dar sobre su conducta y personalidad, son la casa, la familia y el árbol. Aquí os dejo el cuadro explicativo que aparece en el libro de Jacqueline Gassier:

También conviene tener en cuenta otros aspectos sobre la temática de los dibujos:

• Temas muy diversos: es característico de un niño fácilmente influenciable, con un humor inestable.
• Olvidos u omisiones: aquel elemento que olvida colocar en un entorno evidente, por ejemplo, un integrante de la familia, es algo de lo que quiere alejarse.
• Temas diferentes en ambas caras: el niño busca arrinconar aquello que se encuentra en el reverso de la hoja, que bien puede ser un objeto, un personaje o cualquier otra cosa.
• Repetición de un tema: siempre y cuando no se haya sobrevalorado previamente un dibujo similar o de la misma temática, puede significar que el niño busca recrear el estado anímico que tenía en una experiencia feliz vivida con anterioridad o, por el contrario, puede que no haya logrado aceptar una situación y quiera reiterar que le molesta.
• Originalidad: indica capacidad para defender las opiniones propias. También puede hacer original un dibujo corriente para deformar una situación que no le agrada y que no quiere aceptar tal cual es.
• Transparencia en ciertos elementos: o bien puede indicar que se trata de un niño inteligente e intuitivo, o bien que se trata de un niño propenso a mentir y a ocultar sus sentimientos, que se siente culpable por su comportamiento y busca que le descubran para liberarse de esa culpabilidad.